En noviembre, se cumplió un año de que el gobierno uruguayo firmara con la pastera UPM, el contrato que detalla las obligaciones para nuestro país, en el caso de que la pastera UPM decida antes del 20 de marzo del 2020 instalar una segunda planta de celulosa en Uruguay, también el contrato tiene una serie de exigencias previas, que Uruguay se comprometió a realizar en forma perentoria.