Hace mucho mucho tiempo (40 años aunque parece que han pasado 40 siglos), cuatro mujeres esposas de políticos y personas muy influyentes en Estados Unidos estaban escandalizadas por la música que sus hicos adolescentes traían a casa. Nada demasiado extravagante: Madonna, Prince, Cindy Lauper... Pero se pusieron a escarbar y sacaron más canciones nocivas (para ellas) de Heavy metal más o menos de moda en aquella época como Motley Crüe o Judas Priest y de metal extremo como Venom o WASP. Se denominaron PRMC (centro de recursos musicales para padres) y lograron que se etiquetaran los discos y se calificaran como las películas. También elaboraron una lista de las 15 canciones más sucias, que efectivamente iban desde el pop de Sheena Easton hasta AC/DC. Casi todas las canciones tenían temática sexual o lenguaje explícito, o implícito que un niño o adolescente sería incapaz de descifrar. Muchos lo vieron como una censura directa a la libertad de expresión. Estas etiquetas ya están en desuso aunque las plataformas de música por internet siguen calificando las canciones a discreción de los padres. De esta lista de 15 canciones 'sucias', las Filthy 15, vamos a hablar en el programa del 2 de abril de 2024 de Espíritu de la Radio, siempre en Formentera Radio.
