Londres, 26 de Diciembre 1992.
Seymour ha vuelto del Infierno y ha asesinado a Mary arrancando a su bebé del vientre. Acto seguido ha arrebatado la Tarótica de las manos de Dillon, Keiran, Johny y Andrew, y les ha amenazado con hacerles cosas peores si vuelven a entrometerse en sus planes. Los cuatro acaban profundamente afectados mentalmente y tratan de intentar volver a la normal olvidando cualquier cosa relacionada con Seymour, Mary o la Tarótica.
Sin embargo, esta vuelta a la normalidad se ve truncada cuando son contactados por alguien que puede ser un posible aliado en su lucha contra Seymour.