Londres, 5 de Enero de 1993
Tras haber encontrado en el aristócrata Rupert Faraday a un aliado contra Seymour, los cuatro compañeros deciden esperar la prometida distracción que necesitan para entrar sigilosamente en el hospital psiquiátrico de Sandburn y visitar a la Diosa de los Olvidados.
La visita a la sala donde en sus vidas pasadas encerraron a la anciana divinidad para ayudar a Seymour a conseguir la Tarótica demostrará que aquella noche de 1892 hicieron algo más que darle un arma muy peligrosa a un loco. Habían condenado sus almas a la oscura baraja.