Vivir bajo la Cruz. El propósito de Jesús con su sacrificio en la Cruz, no fue solamente salvar a "individuos". También tenía como propósito crear una nueva comunidad que es descrita en el Nuevo Testamento. La cruz es la esencia de esta comunidad. La cruz cambia la manera de ver el mundo y la manera de vivir y de relacionarse con los demás.
La cruz trae una nueva actitud hacia Dios, hacia nosotros mismos, y hacia las personas tanto dentro como hacia fuera de la comunidad cristiana. Pero también cambia la actitud del cristiano hacia el sufrimiento y el mal.
