Aquellos que somos padres sabemos que somos imperfectos y cometemos errores, pero mientras nuestro corazón siga latiendo, hay tiempo de revertir tu situación de adversidad.
Como hijos de Dios podemos disfrutar esa relación que existe entre padre e hijo, debemos entender quien es él como Papá y cuanto nos amó.
En este mensaje Díos nos moviliza a reconciliación.