Es sorprendente que en esta novela se le otorgue un poder tan grande a la ballena, se habla de ella como de un agente inteligente. Esa agencia es descrita por Ismael como malintencionada y eso hace visible la ceguera humana: ¿qué esperaban, que la ballena se quedara inmóvil ante el ataque contra ella? Lo épico en esta novela es la cacería de la ballena, la persecución, los peligros, la muerte, la hazaña, pero no la estoy exaltando. Es admirable la pasión que sienten los personajes por la ballena, la humanizan y la cosifican, pero es una pasión por la dominación, la muerte, el asesinato. Un poco como el toreo, una “posesión” retorcida. La ballena es una heroína, un contrincante superior al cazador, diría yo. Porque posee singularidades que la acercan a la perfección: “Como todo lo que es poderoso, la ballena muestra una falsa faz al mundo común.” La ballena es grave y profunda y es el más devoto de todos los seres…
Cápsula producida por Radio Universidad. Radio UAA. 94.5 FM