La policía resolvió hace unos días, de la peor manera posible, la desaparición de una mujer, ocurrida hace diez años. A Ana María Martos, una joven de Sant Feliu de Llobregat, se la había tragado la tierra en 2004. Nadie, ni siquiera su propia familia, pensó que esa desaparición escondía un terrible crimen ahora esclarecido por la policía gracias a su tesón y, ya verán, a una misteriosa llamada de teléfono. Luis Rendueles y Manu Marlasca cuentan esta triste historia que habla de una echadora de cartas, su familia de estafadores y un brutal asesinato.
