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Como conoces muy bien, porque lo hemos recordado reiteradamente en muchos episodios, la gestión de una empresa se basa en la obtención de información de la actividad y su estructuración para validar la lógica del resultado obtenido y tomar decisiones y acciones que la potencien o corrijan. Para establecer esta lógica y dependiendo de la naturaleza de la actividad de la empresa, uno de los métodos que muy comúnmente se utilizan es el establecimiento de centros de coste que aglutinen el gasto y permitan una mejor evaluación e interpretación del mismo, aplicando los correspondientes análisis verticales y horizontales. Sin embargo, existen organizaciones en las que, debido a su excesivo aplanamiento y su fuerte componente comercial, no resulta posible establecer centros de coste definidos sobre los que realizar estas imputaciones. En estos casos, es conveniente realizar las imputaciones directamente sobre los centros de ingreso, estableciendo incluso un centro de coste por vendedor si la estructura de organización es extremadamente simple. De esta forma, podrás mantener un vínculo directo entre los ingresos producidos y la estructura de coste que permite obtenerlos, y a su vez, establecer los distintos márgenes y resultados intermedios de la actividad. Esta operativa te permite, a su vez, integrar distintos centros de ingreso-gasto y obtener información cruzada por zonas, actividades y cuantos criterios de información requieras. Por simple que sea tu organización siempre es posible, porque es necesario, obtener información sobre ella más allá de cifras globales de ingresos y gastos. Debes establecer resultados, márgenes y ratios y vincularlos a indicadores que previamente habrás establecido. Esta práctica te permitirá establecer vinculaciones entre las acciones y los resultados y establecer las ineficiencias que se están produciendo. La alternativa es ir ciego y vincular el resultado exclusivamente a la cifra de ventas y al final del ejercicio. Ambas prácticas son un gran error. Debes desarrollar tu capacidad de síntesis para, a partir de unos pocos datos, poder interpretar adecuadamente la evolución de la actividad y anticipar las acciones que corrijan o potencien estos resultados.