Los pensamientos negativos crean una química en nuestro cuerpo que nos mantiene en "modo huida" y nos aleja del "modo creativo". Está química puede ser cambiada voluntariamente a través de pensamientos positivos y actividades que aquieten nuestra mente.
Mientras más entrenemos nuestra mente a estar en modo creativo iremos creando el ambiente propicio para conectar con la Fuente Creadora y recibir desde nuestro ser interior como Vivir nuestro propósito original.