Israel tenía un negocio próspero de restaurantes. Cuando conoció a Erika quien era una joven y talentosa arquitecta, se enamoraron, se casaron y decidieron que Israel asumiría todo lo económico para que Erika pudiera dedicarse a los hijos y la familia. Por esto Israel decidió trabajar más duro, lo que lo llevaba a estar más horas afuera y a llegar agotado a su casa en la noche sin deseos de hablar mucho. Sin embargo su esposa no estaba feliz y él se sentía frustrado porque aunque en lo económico estaban bien, la relación se deterioraba día a día. En este episodio Israel nos cuenta cómo resolvieron de forma feliz esta situación que ahora les permite trabajar menos, ganar más, y sobre todo estar más felices. En el episodio anterior, el 71, Erika nos cuenta su parte de la historia. En este episodio Israel nos dice: Cómo creó el problema. Cómo lo manejo. Cómo hizo lo contrario a lo que sus amigos y familia le decían, y con esto salvó su relación.