"Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?" (Mateo 6:25)
El materialismo según el diccionario es la "Actitud de la persona que da excesivo valor a las cosas materiales, como el dinero o las propiedades." En los tiempos de Jesús, obviamente era una tentación real, y creo que más que nunca es una tentación constante en nuestros días. Estamos bombardeados por lo que vemos y la tentación es llegar a dar demasiado importancia a las cosas materiales que nos rodean. En una cultura en que muchas veces las personas definen su identidad por lo que poseen, estamos bajo una presión enorme de ignorar el aspecto espiritual de la vida. Ahora bien, no dice que lo material no tenga su importancia, sino que si enfocamos en lo material y nos olvidamos de lo espiritual, estamos en peligro de perder todo. Así lo hizo el rico necio que estaba tan ocupado guardando tesoros materiales que se había olvidado también de la importancia de ser rico para con Dios. Jesús termina este pasaje con un mandato que pone todo en persectiva: buscad primeramente el reino de Dios.
Para varias veces hoy de tu actividad para pensar en lo espiritual. Invierte tu tiempo en conocer a Dios mejor (leer, meditar, orar, memorizar) y servirle. ¡Un buen reto para cada día!