Listen

Description

«Comer mucha miel no es bueno, Ni el buscar la propia gloria es gloria.» (Proverbios 25:27)

Tenemos tendencias peligrosas como seres humanos. Por ejemplo, nos suele gustar lo dulce, pero podemos dar rienda suelta a nuestro apetito y comer demasiado. El sabio ya había hablado de la miel unos versículos antes, aconsejando no comer demasiado hasta hastiarse y vomitar (25:15). Allí el consejo es la moderación, pero aquí el tono es diferente. Compara la situación negativa de comer mucha miel con buscar nuestra propia gloria. Es otra tendencia perjudicial que tenemos como seres humanos. Nos es fácil buscar recibir esta gloria, atención o reconocimiento de otros que creemos que merecemos. Noto dos detalles del texto: primero, no habla de buscar mucha gloria, como para decir que está bien buscar un poco de gloria para nosotros mismos. Más bien, habla sencillamente de cualquier búsqueda de nuestra gloria. En segundo lugar, no dice que buscar nuestra propia gloria es mala, sino, aún más fuerte, nos dice que realmente no es gloria. O sea, si estamos buscando incluso un poco de atención o reconocimiento para nosotros mismos, lo que estamos buscando no es lo que imaginamos. Ahora bien, ¿qué gloria debemos buscar? Cristo contesta la pregunta en su sermón: debemos buscar primeramente el reino de Dios, la gloria de nuestro Creador, y dejar todo lo demás en sus manos. Dios sabe todo lo que hemos hecho y nos exaltará en su tiempo (Santiago 4:10).

No perdamos el tiempo hoy buscando lo que no es gloria. Más bien busquemos obedecer y agradar primeramente a Dios y encomendar todo a su voluntad. (David Bell)