Cuando viajo, me gusta observar los sembradíos con los que me topo a lo largo del camino, y disfruto ver grandes parcelas con diversos frutos que produce la tierra. Todos esos frutos son distintos, dependiendo de la región y de la época del año en que se den. Pero algo que es bastante atractivo de todo esto, es que rara vez te vas a encontrar con un terreno en reposo, porque aunque no logres ver plantas que broten de la tierra, muchas veces el terreno solo se está preparando para la siembra y para una posterior cosecha. Y a propósito de esto, quisiera compartirte una excelente descripción que hizo el gran filósofo y escritor Henry David Thoreau acerca de cómo se crea una verdadera cosecha todos los días. Él dijo que “la verdadera cosecha de tu vida diaria es algo tan intangible e indescriptible como los matices de la mañana o la noche. Es un poco de polvo de estrellas atrapado, un segmento del arcoíris que no puedes agarrar en tu vida diaria”. Es decir, que en tu vida, a lo mejor no estás viendo ahora mismo ningún logro tangible, pero eso no quiere decir que ese logro no exista o que no se esté cultivando para ti. Síguenos y deja tus comentarios en Twitter: @ezaell o en Facebook: https://m.facebook.com/profile.php?id=292411357790605&ref=content_filter