El pueblo de Israel tuvo el privilegio de recibir la ley directamente de Dios, esta normatividad aplica para todo ser humano, sin embargo, nadie la puede cumplir en su totalidad, quedando acusados ante Dios.
Pero Dios nos permite que ya no seamos acusados al tener el perdón de pecados cuando creemos en Jesús, a esto le llamamos gracia.
¿Deseas conocer más sobre la ley y la gracia de Dios?
Te invito a que leas la Palabra, en ella verás la diferencia entre ellas, y además que escuches este episodio, para que tengas libertad de la ley.
¡¡¡Iniciamos!!!