La “planta ideal”. El uso que le damos al pasto tiene su origen en los palacios y castillos europeos, que debían tener grandes espacios abiertos para detectar una posible invasión. Poco a poco, los “verdes pastos” se idealizaron, pasaron a ser parte de extensos jardines y se convirtieron en un símbolo de lujo. Andrés Kalawski y Paula Molina se sientan en el parque a contar la historia del pasto.