La esfera pública en Cuba, tras el triunfo de la Revolución en 1959, se considera estatal, tanto en su formato configurativo como en sus funciones o prestaciones, pues no es accesible a todos (incluyendo el acceso a la prensa), no existen movimientos de libre mercado, no hay personas emancipadas con respecto a las disposiciones gubernamentales. Las esferas íntimas y la privada se confunden y se ensamblan con la púbica destruyendo toda autonomía ciudadana. Contenido Melissa Cordero. Voz y producción Gloria Isabel Rodríguez Cortes