El amor no es perfección, es conexión.
Cuidar, respetar y crecer juntos: ahí está la clave de una relación sana. Pero antes de compartir la vida con alguien, toca mirar hacia dentro, conocerse, entender qué necesitamos y aprender a poner límites.
En este sentido, la psicóloga Silvia Llop propone repensar el amor desde un lugar distinto, recordándonos que el bienestar propio es la base para construir relaciones auténticas y enriquecedoras.