Veridiana Attavanti de familia noble de la Toscana, vivía en una celdita y conoció a san Francisco de Asís que la permitió entrar en la orden tercera en 1221 debido a su vida de soledad y oración.
Convivió con dos serpientes para mayor penitencia y nunca le habló de esto a nadie. En el momento en que se fueron, ella supo que su muerte estaba cerca. Ese dia, las campanas del castillo doblaron sin que nadie las tañera.
Hablando de eremitorios y celdas san Francisco de Asís vivió en el eremitorio del monte Subasio, para conocer su vocación y saber que quería el Señor para el. Aunque fue humilde y le pidió oraciones de discernimiento a santa Clara y otro fraile.
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Que Dios te bendiga y te inunde de paz.
Paz y bien!