Desde hace décadas, nuestro entorno cultural ha sido una exaltación del crecimiento. La publicidad, la música, el cine y algunos géneros literarios han hecho atractivo el exceso: vehículos de lujo, grandes ciudades de acero o megacorporaciones tecnológicas que cambian la sociedad. Pero ¿cómo afecta esta idealización a nuestra lucha contra la crisis climática? Hablamos con Azahara Palomeque y Gisela Baños del poder que tiene imaginar mundos más amables, justos y verdes para no dejarnos derrotar por el presente y cultivar la esperanza por futuros alcanzables.