Listen

Description

Tras aquella horrorosa batalla en Heraclea, Pirro no se decidía a volver a enfrentarse a los romanos, por mucho que los hubiera derrotado. Por tanto, envió al elocuente Cíneas a Roma para tratar de acordar la paz. Sin embargo, los elaborados discursos del orador no tuvieron efecto y, cuando Pirro trató de sobornar a los senadores para hacer lo que él quería, se encontró con que eso también fue en vano.

Fabricio, el embajador romano, fue a su tienda de campaña, y Pirro trató de aterrorizarlo colocando un elefante oculto tras la tienda y haciéndole sonar la trompa en un momento dado. Fabricio nunca había escuchado algo tan horrísono, y se imaginó que había llegado su hora, pero siguió manteniéndose firme en la negativa de la paz.
👉 Y recuerda: https://humanistasenlared.com/boletin/

Fuente: «La historia de los romanos», de Hélène Adeline Guerber, disponible en https://academialatin.com/cultura-romana/historia-romanos-guerber/