“Han cerrado la boca de tanta crítica infundada de quienes no soportan que las mujeres ocupemos los lugares que creen reservados para los hombres. La misma hinchada es oportunista y desagradecida: tardó mucho tiempo en aplaudirlas de verdad, en acompañarlas a los estadios y lo empiezan a hacer ahora porque ellas lo han vuelto imprescindible.”