Estoy
donde tú estás
y cuando me alejo,
me avecino.
Porque te llevo en mí
y eres mi destino.
Mujer, mujer, mujer,
muelle en mis noches
y en mis días,
la flor de mi camino.
Todo nos une
y nada nos separa.
Ni el viento,
ni la lluvia,
ni la senda
por donde te sigo.