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Fácil es convencer a muchos, menos a los verdaderos, cuando se tiene dinero. Sin dinero toda campaña o empresa está condenada al fracaso. No puedes dar un paso y hacer que todo fluya sin dinero. Sin embargo, los que solo buscan el poder terrenal y abandonan el camino de la Fe, y olvidan nuestra Santa Causa, fracasarán también. Los caballeros templarios no tenían dinero, pero la Orden fue poderosa, después de los primeros años. Una de las causas que la llevó a la cima fue la entrada del Conde Hugo de Champaña, en 1125. Cuatro años después, en 1129, durante las fiestas de San Hilario, se presentaba la Regla del Temple, en el Concilio de Troyes. Este fue, sin dudas, el paso que la catapultó hacia el éxito. A partir de allí, los caballeros templarios recibieron apoyo y donaciones. Más adelante, con las bulas promulgadas por el papado. 1139. Inocencio II. Omne Datum Optimum. 1144. Celestino II. Milites Templi.1145. Inocencio III. Militia Dei. L'Ordre du Temple se convertiría en una de las instituciones militares y religiosas más influyentes y poderosas de la Edad Media. No obstante, después de casi dos siglos de existencia, los templarios cayeron bajo las presiones del rey Felipe IV de Francia y su hombre de confianza, Guillermo de Nogaret. Pero... La historia no terminó allí... Hoy (en pleno siglo XXI) en casi todo el mundo, han surgido cientos de Asociaciones y grupos vinculados (de una manera u otra) a la historia de la Orden templaria. Desde 1705, en Francia, con la participación del Duque de Orleans, y posteriormente, la llamada OSMTH original, fue reconocida y aprobada por Luis XVIII de la casa de Borbón y luego por Napoleón III. Y como es conocido por todos, las organizaciones iniciáticas llamadas órdenes templarias modernas, derivadas de las divisiones o cismas que ha tenido la OSMTH original, se centran más en el odio y el rencor y no en el amor y la misericordia. Algunas veces por la influencia de la masonería, y otras, por los intereses personales de quienes buscan el reconocimiento social. Viven cada una inmersas en una continua guerra o competencia, por demostrar cual de ellas tiene más legitimidad o posición. Y no faltan los pequeños grupos dispersos o divididos en las regiones o países donde, hasta para conseguir un manto y una espada para la ceremonia es difícil. Pese a todo esto, hay gente que busca la unidad y gente que aparenta ser lo que no es. Asimismo, hay gente que sigue a una persona por su dinero y se deja engañar por sus atenciones y promesas. Pero esta gente, primero tiene que recurrir a la calumnia y la traición, para subir o ascender a costa de otros. Dice un viejo proverbio: para desprestigiar a una persona, antes deben socavar su imagen o viceversa. Y luego... se hacen llamar cristianos y templarios. Dios, que lo ve todo, sabe muy bien lo que digo. El que tenga ojos que mire. El que tenga oídos que escuche. Non Nobis Domine Sed Nomini Tuo Da Gloriam. 030525. Cristo es mi verdad y mi espíritu vive por Él. Amén. Gracias Milord. Infinitas bendiciones para todos. Amén.