El día 30 de julio de 1976 nació este pequeño ser... La clave para crecer es reconocer nuestra pequeñez en el vasto universo que nos rodea. Algunas veces nos encontramos en la encrucijada y nos preguntamos a qué hemos venido al mundo? Para qué nacimos o cuál es la esencia de nuestra existencia? Para las mentes mediocres venimos a disfrutar la vida y nada más. No son pocos los que dicen que debemos disfrutar porque al morir nos vamos a llevar solo eso. Qué cosa? Qué nos llevaremos de este mundo? Nada. Nacimos desnudos y nos iremos vestidos, con un poco de conocimientos y mucha experiencia. Habremos amado y también sufrido bastante. Pero las riquezas materiales y las alegrías nos abandonan ese día. Sin embargo, no es tan malo perecer. No para nosotros. Solo sufren los que se quedan y nos aman o quisieron en esta vida. Solo el recuerdo de lo que fuimos y quisimos. Acaso unas fotos y escritos, algún libro que dejamos, cartas, poemas, canciones... Algunas lágrimas derramadas o vertidas en momentos cruciales... Y sueños, metas o aspiraciones que no cumplimos... O que no se pudieron cumplir o realizar. Somos un manojo de caprichos y esperanzas. Somos infinitamente capaces de todo y también ignorantes de mucho. Nadie sabe lo que le espera cada nuevo día. Y es precisamente este hecho lo que nos hace más dependientes de la totalidad llamada ora Dios, ora Destino. Para unos pocos, hemos venido y fuimos creados con un propósito. Nada sucede al azar y todo tiene un por qué. La mayoría piensa que ganar títulos y honores o acumular dinero, tener un carro, una moto... los hace grandes. Y esto los llena de arrogancia, y se les olvida que todos tenemos intestinos cargados de mierda o excrementos que se nos acumulan y suben para la cabeza... En algunos casos. Mi consejo es que sean más humildes, más honestos, más humanos. Reconozcan vuestra pequeñez y amen sobre todas las cosas a nuestro creador... Los que crean en Dios padre celestial y los que no... Amen a su padre y su madre terrenal. Eso es importante. Y sobre todo... Amen a sus hijos, como Él nos ama. No culpen de sus enfermedades o desgracias a un ser que no pueden ver sino solo sentir... Los que lo sienten. El resto... Siga fumando y bebiendo, perdiendo su tiempo y jugando al dominó... Oyendo reggaeton... Haciendo y deseando el mal a otros... Mientras, los verdaderos, crecemos y nos elevamos por encima de nuestras propias miserias humanas, y de la podredumbre universal. Recuerden... Fuimos creados, no somos el resultado de una simple casualidad o experimento evolutivo. Somos así desde la matriz y al salir de los testículos de papá, y de los ovarios de mamá, después... Y no diré más. En las muchas palabras está el error y los números y cálculos van a dar siempre lo mismo. Somos más que carne y hueso y deseos. Somos más que angustias, sacrificios y desesperos o desvelos. Somos alas, y picos, y garras, y colmillos... Una especie de animal que piensa, vive y obedece... O se vuelve rebelde. Según las circunstancias y las personas que nos rodean. Somos naturaleza. Aún así... Todos vamos a morir un día. Somos parte de un ciclo... O de varios. Y somos una ínfima parte del todo. Como un órgano vital o una célula en el cuerpo de Dios... En el vasto universo misterioso y silencioso... Allá donde nuestros ojos no pueden ver hay más... Hay sonido en el silencio... Hay luz y oscuridad, y hay mucha vida... Aprende y escucha lo que dice tu cerebro. La sabiduría y la inteligencia es un don de Aquel que nos creó, pero los pequeños mortales nos creen locos y soñadores... Y no. Somos conscientes de que... Allá afuera... Hay algo más. Y dentro de nosotros mismos existe y arde una llama eterna, inmortal... Que vive después de la muerte. La chispa divina, el espíritu... Nuestra Alma... No somos solo carne y huesos. No solo somos un manojo de caprichos y deseos. Y a pesar de todo esto, somos pequeños. Grande solo es Aquel... O aquellos que nos hicieron así... A su imagen. Me sumerjo y luego trato de subir o emerger... Y es mucho lo que no sabemos o no alcanzamos a comprender. Hay silencio en las palabras. Hay sonido en el silencio. Y antes de la nada... Siempre fue todo. Por lo que nunca hubo nada. Somos algo, somos alguien y para Alguien importamos. Hoy... Estoy a punto de volver a nacer... Todavía restan o faltan unas horas... Y cuando amanezca... Cuando "salga" el sol... Cuando se haga visible... Todo volverá a empezar. Como el primer día... Gracias mamá. Gracias papá. Gracias padre celestial. Gracias a todos por llegar hasta el final. Por leer y comprender... Que somos pequeños, tiernos y a veces arrogantes, en este ENORME UNIVERSO. Julio 30, 2025. Proverbio 30:7 (*) Salud y bendiciones para todos. Paz y Prosperidad... Qué así sea... En esta vida...
Somos letras... O una palabra...
Somos números... O una cifra... 76073010545... 157... 427... 445112...
Somos una mezcla de Emociones y... Energía...
Muy pocos tienen 2 fechas de nacimiento... Yo tengo 2...
Muy pocos han vivido para contarlo... 20 de mayo de 2015...
Sin electricidad...
Sin conexión... (Internet)
Nuestra vieja y actual realidad...
Por esa infinita sed de amar y de partir... Por ese amor y desamor por la vida... Por los que sufren y lloran... Por los que viven y mueren... Por Dios... Por Jesús...
Por la belleza de la tristeza... Cuando nos hace más humanos...
Por los hijos de nuestros hijos...
Aquel que me salvó de la muerte... Aquel que me levantó y me fortalece todos los días... Sabe lo que digo... Aquellos que saben lo que hace un tren de verdad...
✠ Salam Aleikum! Wa Aleikum Salam! ✠ 1444 Año de la Hégira, 5785 para los judíos, 2025 para los cristianos...