Santiago, un hombre de 32 años de un pequeño pueblo en Bolívar, compartió su aterradora experiencia. Hace un año, mientras estaba solo en su casa, escuchó un grito desgarrador en la oscuridad, un lamento profundo y aterrador que parecía provenir de otro mundo. Su abuelo le había hablado del "Grito del Otro Mundo", pero nunca pensó que lo escucharía. Desde esa noche, siente una inquietante presencia, aunque el grito no se ha repetido. Las imágenes que acompañan este relato son representativas y pertenecen a sus respectivos dueños.
