Entre el 5 y el 7 de febrero de 2024 tuvo lugar un encuentro del consejo de cardenales que el papa Francisco puso en marcha al comienzo de su pontificado. El primer día estuvo dedicado a la reflexión sobre el lugar de las mujeres en la Iglesia, para lo cual contaron con la presencia de la salesiana Linda Pocher, la vírgen consagrada Giuliva Di Bernardino y la obispa anglicana Jo Bailey Wells, secretaria adjunta de la Comunión Anglicana. La presencia de esta última puede suscitar suspicacias entre quienes ponen en duda la necesidad de una voz femenina entre los cardenales. Sin embargo, al margen de profecías que auguran el próximo fin de la Iglesia Católica, se pueden extraer varias lecturas del encuentro entre la obispa y los purpurados que apuntan hacia un modelo de Iglesia más sinodal donde se escucha la voz de todo el mundo.