Día 314 – Dios transforma lágrimas en cosecha
El Salmo 126 nos recuerda que Dios tiene el poder de cambiar temporadas: del llanto a la alegría, de la siembra con lágrimas a la cosecha abundante. Aunque hoy parezca duro, Dios ya prepara un futuro donde verás fruto de lo que estás creyendo, sembrando y orando.