Dios y yo Hechos 8:35. Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le anunció el evangelio de Jesús. Si nosotros callamos las piedras tendrán que hablar. Esta fue una de las respuestas que Jesús diera en su momento, a sus discípulos. Se imaginan ustedes cuán dura fue esta sentencia para sus oyentes. Pero luego vemos que tomaron al pie de la letra el anunciar el evangelio de Jesús. En este pasaje vemos a Felipe acercarse a un inconverso, y hablarle de Jesús, la palabra dice que le hablaba el evangelio de Jesús. Las buenas nuevas que Jesús trajo a este mundo, no pueden quedar guardadas en lo privado de nuestro corazón. Si hemos recibido ese evangelio maravilloso, que transforma las vidas, que perdona pecados, y nos asegura un futuro eterno con Cristo, es un maravilloso mensaje, es una maravillosa noticia, debemos anunciarla, a los cuatro vientos, no podemos quedarnos callados. Por ello acá vemos que la labor de uno de los discípulos de Jesús, fue anunciar el evangelio, esta persona recibió ese evangelio muy contenta, y fue contada entre los cristianos de aquella época. Ahora nosotros que nos llamamos cristianos de esta época, ¿Cuánta oportunidad aprovechamos para anunciar el evangelio de Jesucristo? Deberíamos ser conscientes que muchas veces, desperdiciamos la oportunidad para anunciar el evangelio de Jesucristo. Ahora mismo hay una necesidad profunda, en muchas personas, de escuchar este evangelio maravilloso. No nos quedemos nosotros únicamente con la buena noticia, del Evangelio de Jesucristo. Anunciemoslo a todas las personas que podamos hacerlo, es importante que nosotros reconozcamos, la urgencia que hay de anunciar el evangelio de Jesucristo. Muchas personas lo único que necesitan es oír de este maravilloso Evangelio, y podrán cambiar el rumbo eterno de su existencia. Pero también depende de cuán motivados estemos nosotros, para anunciar el evangelio de Jesucristo. Así que, estimado hermano, que lee o escucha este devocional, sobre nosotros los cristianos, recae una tremenda responsabilidad, de anunciar este maravilloso evangelio de Jesucristo, a todas las personas, que nosotros podamos hacerlo. Usted querido amigo, oyente o lector, que aún no ha recibido este maravilloso Evangelio, déjeme recomendárselo por este espacio, y que usted no pueda irse de este mundo, sin antes haber experimentado este maravilloso evangelio de Jesucristo. No le estoy presentando una denominación, o un nombre de iglesia, estamos presentandole a Jesucristo, que es el autor de este evangelio maravilloso. Estimado lector o escucha, sea usted hermano convertido o amigo inconverso, hoy no puede pasar por alto este mensaje maravilloso, reciba a Jesucristo como su Salvador, si aún no le ha recibido. Y si usted es una persona que ya disfruta de este maravilloso evangelio de Jesucristo; Publíquelo y prediquelo, a todos aquellos que aún no lo han recibido. Por ello el consejo en este devocional hoy es; Prediquemos el evangelio de Jesucristo. Que Dios les bendiga amados hermanos. Pastores Marroquín