Dios Y Yo S. Marcos 13:33. Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo. Ya no es tiempo de perder el tiempo. Cuando hablamos del tiempo, estamos hablando de el momento en el que nosotros ahora mismo estamos viviendo. Pareciera que cada vez el ambiente se torna un poco más peligroso dañino y diríamos, hasta muy cómodamente pecaminoso. La situación es que el tiempo en el que estamos viviendo, es un tiempo que debemos tener nosotros mucha sabiduría para vivir. El pasaje de hoy hace referencia a uno de los eventos que la iglesia tradicional, bibliocéntrica y cristocéntrica, espera con ansias, y es el día del Señor o como también le conocemos, el arrebatamiento de la iglesia. El pasaje nos dice que esos días estarían llegando, cuando nosotros menos lo esperemos, y hace una recomendación muy enfática, precisa y concisa; Mirad velad y orad. Estas tres acciones que nos pide que nosotros realicemos, tienen que ver precisamente con el tiempo, que estamos viviendo; Mirad es una manera de decirnos estemos atentos, observemos, pero a la vez estemos velando, y la palabra velar significa estar conscientes, que debemos estar en una íntima comunión con Dios. Por último dice orad quizás uno de los mandatos más preciosos que podemos encontrar en la Biblia, es cuando ella nos manda a orar, o sea a platicar con Dios. Estimado lector o escucha, no sé cuánto usted puede asimilar, la peligrosidad del tiempo que estamos viviendo, reconozcamos que es difícil poder mantenernos a flote, espiritualmente hablando, si descuidamos nuestra relación con Dios. Querido amigo o hermano, déjeme recordarle que la palabra de Dios nos anima, a estar firmes en el Señor. El tiempo que estamos viviendo es difícil, pero más poderoso es el que está en nosotros, que el que está en el mundo, y él nos promete ayudarnos. El tiempo que estamos viviendo es un tiempo, que debemos observarlo para poder estar velando, ante cualquier situación, y sobre todo orando, para mantenernos firmes en él. Estimado lector o escucha déjeme también exhortarle, que no se deje dominar por el tiempo, que usted pueda visualizar este tiempo que estamos viviendo, que para nada es bueno, y como lo diría en una ocasión el apóstol Pablo; Aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Así que hoy estimado lector o escucha, propongamos en nuestro corazón, vivir de manera agradable para Dios, y estemos atentos al tiempo que estamos viviendo. Que Dios les bendiga amados hermanos. Pastores Marroquín