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Dios Y Yo Josué 1:8. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. La prosperidad es el sueño de todo ser humano, y mejor aún si esa prosperidad es integral. El pasaje que hoy estamos estudiando, es un pasaje muy conocido por su contexto inmediato, porque es quizás uno de los textos, que la mayoría nos aprendemos, como animándonos para esforzarnos, para ser valientes, y para recordarnos la promesa de la presencia de Dios en nuestras vidas; Mira que te mando, que te esfuerces y seas valiente. Pero en su contexto este pasaje tiene como ya lo mencionábamos al principio, la fórmula de la prosperidad. Es que en este versículo 8 de Josué capítulo 1, encontramos algo maravilloso que nos recuerda, que nosotros debemos practicar, si queremos obtener la prosperidad integral. Cuando hablamos de la prosperidad integral, estamos hablando, no solo de una prosperidad que nos hace tener lo necesario materialmente, sino que nos hace estar contentos con lo que tengamos, porque también esta prosperidad es espiritual. Por lo tanto hablar de prosperidad en este pasaje, no se limita solamente aspectos materiales, tiene que ver con todo lo que requiere, para tener una vida exitosa en esta tierra, y en la eternidad. Por lo tanto hay tres acciones que quiero mencionarles, que debemos practicar si queremos nosotros alcanzar la prosperidad. Número uno, la palabra nos dice que nunca se aparte de nuestra boca la palabra de Dios, que nuestro hablar, que nuestro comunicarnos con los demás, esté vinculado estrechamente relacionado, con los dichos o con la palabra de Dios. Hablemos menos de nosotros mismos, y hablemos más de Dios. Lo segundo que debemos practicar nos dice la palabra, que debemos meditar en la palabra de Dios de día y de noche. Este meditar significa profundizar en nuestro diario vivir, que nuestro actuar, no solo nuestro hablar, sino que también nuestro actuar esté ligado con la palabra de Dios. Por último dice que debemos guardar y hacer lo que la palabra de Dios nos dice; Para que guardes y hagas conforme a lo que en él está escrito. Se da cuenta, la palabra nos dice que debemos hablar, meditar y practicar, los dichos, los preceptos de Dios en nuestra vida, y con ello estaremos asegurando una vida de éxito en esta tierra, y en la eternidad. Por lo tanto no olvidemos que de nosotros depende, para que Dios actúe en nuestra vida, de manera exitosa, y Dios proveerá todo lo necesario para nuestras vidas, no solo físicamente, materialmente, sino también emocional y espiritualmente. Hasta entonces nosotros dice la palabra, que hasta que cumplamos lo que el texto nos está diciendo hoy, hablar de Dios, meditar en Dios, y practicar lo que Dios nos dice, que debemos practicar, hasta ese entonces, haremos prosperar nuestro camino, y que todo nos saldrá bien. Así que usted hoy puede quedar condenado al éxito, si realiza estas tres acciones que la palabra nos dice. Es aquí a donde encontramos la fórmula de la prosperidad. Que Dios les bendiga amados hermanos. _Pastores Marroquín_