Bajar la ansiedad es un desafío personal, pero también de muchas de las personas que me rodean. Me atrevo a decir que de un gran porcentaje de los seres humanos. Y aunque por momentos creas que es MISIÓN IMPOSIBLE, la verdad es que no es así. Hay pequeños trucos que con -muy poca- voluntad podés aplicar en tu día a día y tener una vida más placentera y más productiva. (En el sentido de que cuando te sentís mejor, todo lo que hagas te saldrá mejor) Dale Play, con mucha calma por favor.
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